Le ayudo a estudiar y acabo dándole todo mi humedo coño para que no pierda la concentración

Él necesitaba ayuda para estudiar, y yo estaba dispuesta a ayudarlo a concentrarse... de todas las maneras posibles. Mientras repasábamos, la tensión entre nosotros crecía, hasta que ya no pude resistir. Decidí darle algo más para mantener su atención: mi húmedo coño, dispuesto a complacerlo en cada movimiento. Me entregué por completo, sintiendo cómo se adentraba en mí, y en ese momento supe que no solo no perdería la concentración, sino que esta sería la sesión de estudio más intensa que ambos jamás olvidaríamos